Hay un pueblo lleno de
Sanchos ,pues los Quijotes marcharon hace tiempo, donde existe un
facebook de los muertos. Este libro , que en ingles sería deadbook
y en esperanto libro mortinta, puede ser desde un tablón de anuncios
hasta una pared cualquiera. Y suele estar situado en un lugar público
como una escuela, un bar , o un supermercado. Su diseño es bien
sencillo, y no siempre incluye una foto reciente del muerto. Suele
indicar, bajo una cruz cristiana cuya vertical hace de margen
izquierdo: nombre, día del fallecimiento, edad en el momento de la
muerte, nombres de los familiares más próximos, fecha de la misa
por su alma o equivalente para los que no deseaban ceremonia, y fecha
del entierro o crematorio.
Cuando hay una
publicación en algún tablón, o en todos los tablones, muchos
vecinos acuden, se acercan, se aproximan. Desde sillas de ruedas,
andadores, coches, furgonetas, y zapatos varios, se aproximan con sus
dueños a informarse. Bien saben los Sanchos que si es menester que
el muerto sea un conocido hay que acercarse a dar el pésame si o sí,
salvo que quieras ser desterrado de la casa afectada. La familia
ofendida, si se percata de tu ausencia en el entierro, puede hacerte
la cruz, y nunca mejor dicho, hasta tu propia muerte. La familia
afectada, presumible-mente, no te saludará en ofensa y desidia,
aunque desde hace años no hubiese compartido ni un minuto o segundo
contigo. La tierra de Sanchos es así. Es un tierra cruel.
Bien podrían celebrarse
nacimientos y publicarlos de igual manera, pero no existe el
equivalente a las funerarias cuando hay nacimientos. Lo que si es
bueno, en tierras de Sanchos y más allá de sus fronteras, es
celebrar lo años conforme van llegando. Esos eventos, concretamente,
no dejan de ser muy interesantes. Celebremos muchos años juntos,
amigos Sanchos, pues Quijotes conozco pocos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario