Epis
tiene muchas hermanas, a cual de ellas más guapa. Una de ellas, en
contra de su voluntad pero ayudada por su necesidad actualizada, vive
aún con su madre y colabora en las tareas del hogar. Esas tareas
rutinarias y perpetuas que, normalmente, no dan ni un euro y cuestan
un montón de trabajo. Tareas como cuidar de los padres, cuando están
enfermos, también suponen una gran carga de trabajo y, salvo que los
abuelos te dejen cierto acceso a la cartilla , cero euros o muy cerca
del cero.
La
hermana de Epis , tal como Epi pero de otra manera, lo lleva regular.
Con sus estudios básicos, consecuencia de la necesidad de colaborar
en casa o aportar algo de dinero a la familia en el pasado antes de
la burbuja reventada, y con el desempleo actual, antes que el paro,
pues no para en casa, lleva como puede su situación. Llora y habla
algo menos que Epis y , en desastrosa consecuencia, está cayendo en
una depresión de caballo aunque ella no lo sabe. La depresión suele
aparecer en cualquier momento aunque no suele avisar y ,
desgraciadamente, el silencio de la propia desgracia, o el victimismo
silencioso, terminan pasando su factura. Pero claro, estas últimas
frases son corolario de un animal que teclea, del autor de este
texto patatero, de un animal precario próximo al precariado o,
mejor, a la pobreza temporal antes que eterna.
La
hermana, de Epis, colabora con su madre en la limpieza y orden del
piso, en el abastecimiento, y en la cocina para ellas, incluyendo a
Epis, y para las fiambreras del congelador. También, puntualmente,
van juntas a limpiar pisos en negro, o en sumergido. La economía
sumergida es muy criticada pero a bajo nivel, cuando se trata de
cantidades mensuales que rondan los doscientos euros, es un trabajo
digno sin derechos. Si fuese economía flotante no habría recursos
en muchas casas que contratan esos servicios, pues cuando se habla
de dar de alta se suele ofrecer una cifra, o esa misma cifra menos
los gastos sociales. Siendo la precariedad lo más frecuente, la
trabajadora suele optar por la cifra más grande. Normal.
No
es que la madre castigue psicológicamente a su hija, sino más bien
las vecinas y prójimos que con intención desconocida preguntan
siempre lo mismo:
-¿Tienes
trabajo? ¿Estás buscando? ¡Tienes que espabilarte!
-
#Ya estamos...#
Continuará...
"¡Hemos encontrado a un guionista chévere!" ha declarado el productor de "Pasión de Gavilanes" tras leer las últimas entradas de Carenado.
ResponderEliminarCarenado lanza su nueva app para móviles, que permite, dándole a un simple botón, escuchar sus mejores momentos aerofágicos, despotricar contra los aviones que dejan estelas y, además, hace numerosos comentarios ofensivos contra Naciones Unidas.
ResponderEliminarSi quieres el politono de Carenado, envía "alubias" al 5555.
EliminarPutin ordena secuestrar a Carenado y lo traslada a la sede de Gazprom en Siberia en una furgoneta, seguida de tres trailers cargados de fabada Litoral.
ResponderEliminarBarones del PSOE agitan a Carenado como si fuera una pisicola y lo sueltan en el ascensor en el que iba Pedro Sánchez.
ResponderEliminar"Cero"
ResponderEliminarNota media de Carenado en la carrera de ingeniero de motores.