Bueno, bueno, bueno, hoy
termina un año más y comienza otro nuevo. Evidentemente el
calendario funciona y, aprovechando que esta noche se tiende a
brindar, a besar, a abrazar y , en España, a comer uvas, voy a
teclear unas palabras absurdas, incluso perturbadas, como animal que
escribe por estos entornos de bytes entre bytes.
Antes del expresar mis
deseos para el año nuevo quiero deciros que no soy un chimpancé, os
lo juro por la tostada de jamón serrano, pero uso esa metáfora para
poder gritar en libertad y sin educación, o con menos educación de
la que me dieron de niño. Un momento infantil en que siempre se me
inoculaba miedo e, incluso, prudencia. Un momento en que,
sinceramente, el miedo se confundía con la prudencia y al revés. Un
momento en que lo mejor que se podía conseguir era el respeto. Pero
mi infancia solo es un pasado entre muchos y considerarme un animal,
en este caso un chimpancé, solo buscaba, busca y buscará expresar
mis pensamientos más puros y salvajes sin miedo a perder algo (si es
que aún puedo perder más cosas).
Dichos estos dos párrafos paso a mi
deseo,a mis deseos, para el año que comienza.
- Espero y deseo que los que se creen
grandes, sean pequeños.
- Espero y deseo que los que son
superiores, sean inferiores.
- Espero y deseo que los que no sufren
y no ayudan a los que sufren , sufran como los que sufren. Espero que
sufran en igualdad.
- Espero y deseo que dejemos de
demostrar tanta estupidez...
- Espero que llegue la justicia
inmanente, de la que tanto hablaba, y habla, mi padrino.
¿Qué dirán los libros de historia en
el futuro? (si no son manipulados)
¿Qué en pleno siglo XXI unos seres
humanos engañaban a otros?
¿Qué en pleno siglo XXI mil millones
de humanos pasaban hambre?
¿Qué en pleno siglo XXI el derecho a un techo no era un derecho fundamental?
¿Qué en pleno siglo XXI el ladrón de
estados no iba a la cárcel, y el pequeño ladrón la pisaba pronto?
¿Que en pleno siglo XXI seguíamos
demostrando nuestra estupidez como especie?
Creo, sinceramente, que va siendo hora
de ser una especie cojonuda.
¡Sed buenas personas!
¡Cojones!
¡Sed generosos sin esperar nada a
cambio!
Generosos sin ser tontos
ante estafadores grandes y pequeños.
¡Sed!
Miraros al espejo, y decid:
¡Soy mejor persona que ayer!
Y haced eso cada día...
Entonces, solo entonces, algo habrá
cambiado.
¡Dejaos de tanto celo y envidia!
No dejéis que dominen vuestro futuro.
Solo podéis ser vuestro propio
ejemplo.
¡Dejaos de patochadas infantiles de
ídolos y mitos!
¡Sed buenas personas!
...
¡Cojones!
...
No sois perfectos,
pero podéis
intentarlo con frecuencia.
Yo, en mi animalidad, lo intento.
Intento ser bueno, pero no tonto,
cuando me miro al espejo.
Creo que es posible.
Creo en los alambres.
Creo en el equilibrio.
Creo que podemos ser mejores que el
pasado.
¡Las personas antes que el capital!
¡Vamos!
¡Venga!
¡Go!
...
¡Gojones!
Posdata: este texto no pretende ofender, solo pretende expresar ánimo e indignación. Una combinación complicada. Felicidades.